En uso de su derecho de réplica, la diplomática Harriet Turner se declara auténtica Embajadora de la UNESCO-WFUCA (Federación Mundial de Clubes, Centros y Asociaciones), avalada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a cuyo secretario general, Mr. Ban Ki-moon, ella le rinde directamente un informe de las actividades que realiza en el continente americano.
Con documentos oficiales en mano, Harriet explica al diario ESTO que ella es Embajadora de Paz y Ética Global para América Latina y el Caribe, con carácter de vitalicia y con total independencia de la oficina de la ONU México.
Nacida en Londres, Inglaterra, Harriet Turner de Bastón Azcárraga afirma que a pesar de las injurias en su contra, ella se dedica a trabajar en bien de la humanidad.
Confió que este deseo de ayudar a la gente le nació después de sobrevivir a un cáncer que tuvo hace unos años: “Si Dios quiso que siguiera en este mundo, fue por algo, y yo le juré que dedicaría el resto de mi vida a labores altruistas. Y Él me puso a las personas indicadas que me dieron este nombramiento de Embajadora”.
Durante una reunión en “La Bendita Cantina”, acompañada de su asistente Donají López y del actor y empresario hidalguense Enrique Olmedo, la embajadora Turner acordó con el anfitrión Javier del Castillo que en ese restaurante se realizarán subastas de arte y otros eventos para recaudar fondos en pro de niños de bajos recursos.
Ahí mismo, nombró a Enrique Olmedo como responsable de cultura y espectáculos, encargado de rescatar y enaltecer las tradiciones mexicanas. Por cierto, le regaló a Enrique un precioso cuadro de arcilla sobre relieve de la pintura “Fiesta huasteca” (1928) de Diego Rivera. También anunció que amadrinará en ese bendito lugar al cantante español Ari Sada, quien el 7 de diciembre presentará su disco “Historias”.
Con sus oficinas en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, Harriet dijo que pronto tendrá también un despacho en la ciudad de México, desde donde diseñará y proyectará a toda América Latina varios de los programas que tiene en mente.
En perfecto español y ya conocedora del albur y del doble sentido, así como de la picante comida mexicana, la señora Turner manifestó que cuenta con el respaldo de varias empresas multinacionales que con gusto la apoyarán en sus proyectos que eche a andar.
“Yo no vengo a pedir, sino a colaborar para que México logre bajar recursos económicos por conducto de la UNESCO”, concluyó.
